La mayoría de la gente trabaja exclusivamente por dinero. No vamos a ser unos hipócritas y defender lo contrario. Tan solo una afortunada minoría disfruta de su empleo de tal manera que lo haría sin obtener beneficio económico a cambio. Sin embargo y aunque el dinero es la mayor motivación, los empresarios saben que existen  otras maneras de motivar a los empleados y que no implican un aumento de salario o un incentivo económico.

A continuación os enumeramos las que son, desde nuestro punto de vista, las 7 más importantes:
Unos dulces en la oficina pueden ser una bonito detalle en una mañana estresante.
Los fracasos se asumen entre todos y no se acusa a nadie en particular.
3  Invitar a un café a tus empleados de vez en cuando, y no de manera cíclica, sino cambiando de días. En ese break no se habla de trabajo, se habla de deporte, del tiempo y de noticias relevantes de actualidad.
Un premio como una cena para dos puede ser algo muy valorado por los empleados. Es muy importante que este premio no sea entregado a cambio de alcanzar un objetivo de ventas, ya que entonces parecerá una compensación no económica y será contraproducente.
5 Las salidas en grupo a los karts o al Paintball harán las delicias de tu plantilla y contribuirán a mejorar el ambiente de la oficina.
Sorprende a los empleados con un vídeo por la mañana o una canción para despedir el día.
Espolea a tus empleados felicitándoles cuando hagan bien su trabajo.

Nuestro equipo especializado en salas de descanso promueve trimestralmente el LOVE WORKING en las empresas que cuentan con una de nuestras salas de descanso.